Su esperanza era hacer recordar al mundo,
que justicia, igualdad y libertad son algo más que palabras.
Anat Lavi: Dame un punto de apoyo y giraré mi mundo.
La libertad es lo que tiene.
Hay que pensar más con el corazón y sentir más con la cabeza.
Soy un cigoto que se colocó en un buen sitio para crecer durante 9 meses. Luego me sacaron de la tripa de mi madre (pero no nacà lagarto). Y luego ya... pues lo he ido haciendo lo mejor que he podido. Ahora sigo igual. Haciéndolo como mejor sé. Lo que no es necesariamente bien, claro.