Tras arrancarme brutalmente del útero materno (usando máquinas); crecà en un benévolo ambiente familiar. La infancia la pasé jugando al futbol y soñando ser notario de mayor...
La adolescencia fue bastante traumática (tuve que dejar el futbol, los reyes magos no existÃan, el ratoncito pérez era una rata cleptómana alcohólica, Optimus Prime murió...).
Ahora que soy mayor (y no soy notario), aveces añoro la infancia, creo que mi mejor época fue la adolescencia y espero lo que traerá la marea mañana...