Triste es no tener amigos, pero más triste debe ser no tener enemigos, porque quien enemigos no tenga, señal de que no tiene: ni talento que haga sombra, ni valor que le teman, ni honra que le murmuren, ni bienes que le codicien y nada q le envidie
bueno para los que me concen ya saben como soy y para los que no me conocen pues ya me conoceran