No hay mucho que decir. No soy normal, ni tampoco anormal. Odio las autodescripciones; me abaten muchas cosas, pero en ocasiones suelo divertir mucho y, entre rumores, dicen que soy paciente. Me gustan pocas cosas, me disgustan muchas. Tengo ciertas peculiaridades, pero creo que soy soportable. Bebo, fumo, juego, escribo, leo, estudio, chateo, Facebookeo, rio, lloro, sufro, corro, grito, hablo; al igual que tú: una vida común y corriente. Pero en fin ¿Para qué seguir escribiendo? Laucelm@hotmail.com; aunque al final, puede que resulte en una perdida de tiempo.