El amor es perdernos; estar solos, solos sin nosotros mismos; es robarnos al otro y protegernos la espalda para que no nos hagan lo mismo.
El amor es ser huésped en otro, servir de refugio a otro, es invasión de privacÃa; por eso la culpa, la vergüenza, el regocijo propio.
El amor es callar, es la palabra que grita el mudo en el oÃdo del sordo, el paisaje que miran los ciegos, es la sombra que alumbra las sombras, la piedra empujando al viento, la fogata encendida en la corriente del rÃo.
El amor es el sentido, no el sexto, ni el séptimo, es el sentido; el único, el más confuso, el más vivo.
El amor teje alas que se estrellan en los techos y se van, se van volando rotas