Un cielo de verano, una piedra y los dos en esa piedra, que tapiza la hiedra, sentados y cogidos de la mano.
...Un árbol cerca, un nido en el árbol y un ave que llega sin ruido y que registra de su voz la clave.
A nuestros pies un lago cristalino y en él dos cisnes que su cuello enlazan; espumas que revientan de contino y linfas que parece que se abrazan.
De pronto...un dulce beso que se difunde por el aire vago; si conmigo tu quieres hacer eso, yo tengo una piedra y árbol, nido y lago....