"Hijo mÃo, no te olvides de mis enseñanzas; más bien, guarda en tu
corazón mis mandamientos. Porque prolongarán tu vida muchos años y
te traerán prosperidad. Que nunca te abandonen el amor y la
verdad: llévalos siempre alrededor de tu cuello y escrÃbelos en el
libro de tu corazón. Contarás con el favor de Dios y tendrás buena
fama entre al gente. ConfÃa en el Señor de todo corazón, y no en tu
propia inteligencia. Reconócelo en todos tus caminos, y Él allanará
tus sendas. No seas sabio en tu propia opinión; más bien, teme al
Señor y hude del mal. Esto infundirá salud a tu cuerpo y
fortalecerá tu ser. Honra al Señor con tus riquezas y con los
primero