Soy, mi amor, lo que queda de un abrazo
El vaivén de tibias manos en la cuna
Ese gozo que cabe en tu regazo
Cuando un niño está rezándole a la luna.
Soy un hombre feliz porque te amo
Porque espero que tu entraña se entreabra
E ir sembrando, quedamente, tramo a tramo
Tanto amor recriado en mi palabra
No me mueve más la risa que el lamento
Ni a ti la multitud. Una cuadrilla
Te es bastante, te sobra, te da aliento
Soy la sombra, tú la luz, eres Sevilla
Carlos Herrera