Desde pequeñas nos mentalizan la idea de encontrar un principe azul con el cual viviremos felices por siempre... pero llego el dia en que la realidad se hace presenta y descubri que no quiero un Principe en mi vida y mucho menos un princeso, quiero un HOMBRE , uno de verdad, un hombre que me ame y me respete, uno que sea fiel, que valore cada una de mis acciones, me admire por lo que soy, que quiera mis virtudes y me ayude a crecer y no cometer los mismos errores, que ese hombre conozca a Dios y lo mas importante que le tema... Es mucho pedir?