Mi mente puede, lo que no nos permitieron fue saber que podÃa, para que otros, a través de conveniencias socioculturales manejen nuestra voluntad.
Cuando el hombre tome conciencia de que se educa con el ejemplo, y no con las estupideces que dice, va a dejar de decir estupideces y se va a fijar más en lo que hace.
L.S.