There is a light that never goes out.
No hay casualidades sino destinos. No se encuentra sino lo que se busca, y se busca lo que en cierto modo está escondido en lo más profundo y oscuro de nuestro corazón. Porque si no, ¿cómo el encuentro con una misma persona no produce en dos seres los mismos resultados? Razón por la cual parece que uno termina por encontrarse al final con las personas que debe encontrar, quedando asà la casualidad reducida a lÃmites muy modestos. De modo que esos encuentros que en la vida de cada uno nos parecen asombrosos no son otra cosa que la consecuencia de esas fuerzas desconocidas que nos aproximan a través de la multitud indiferente, como las limadura