Nacà en una edad demasiado temprana... y además, todo lleno de mocos y sangre, sin poder hablar ni andar (y no era un zombi). Era un bebé.
Desde pequeño me llamaban raro, era el más grandote, pero el que parecÃa más joven. No me gustaban ni los coches ni el deporte. Demasiado freak para lo polÃticamente correcto hasta que descubrà que no estaba solo en este mundo... y hasta ahora...