Una joven habÃa tomado clases de ballet durante toda su infancia, y habÃa llegado el momento en que se sentÃa lista para entregarse a la disciplina que la ayudarÃa a convertir su afición en profesión.
Deseaba llegar a ser la primera bailarina y querÃa comprobar si poseÃa las dotes necesarias, de manera que cuando llegó a su ciudad una gran compañÃa de ballet, fue a los camerinos luego de una función, y habló con el director.
Quisiera llegar a ser una gran bailarina, le dijo, pero no se si tengo el talento necesario o que me hace falta.
Dame una demostración, le dijo el maestro.
Transcurrido apenas 5 minutos, la interrumpió, moviendo la cabeza en señal de desaprobación.