Hay veces que mi alma baila tangos con la soledad
y necesito de tabla tu amor para asirme a ella en mi tempestad.
Enséñame a escuchar tus labios a leer el Sol.
Llévame a donde los sueños fabrican tu voz.
¿Dónde estás?
Tengo miedo, ayúdame a caminar
pues sólo nunca yo podré encontrar
la forma de ser libre, quiero despertar.