Antes juzgar mi vida o mi carácter, ponte en mi zapatos, recorre el camino q he recorrido, vive mis penas, mis dudas y mis carcajadas, recorre los años q he recorrido y tropieza ahà donde tropecé y levantante asà como yo lo he hecho, cada cual tiene su propia historia y q cada uno q se meta en sus asuntos cuando te metas en mi pellejo entonces ahà podrás juzgarme.
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Es cierto que cuando la puerta de la felicidad se cierra otra puerta se abre, pero algunas veces miramos tanto tiempo aquella puerta que se cerró que no vemos la que se ha abierto frente a nosotros.
No sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos pero tambien es cierto que no sabemos lo que nos
hemos estado perdiendo ha