"Somos esclavos de las camisas blancas.
Los anuncios nos hacen perseguir coches y ropa.
Trabajamos, nos odiamos por comprar mierda innecesaria para nosotros.
No tenemos ningún objetivo o lugar.
No conocemos la Gran Guerra.
La Gran Depresión.
Nuestra gran guerra es una guerra espiritual.
Nuestra gran depresión es la vida.
Nos educaron en el espÃritu de la televisión, en la creencia de que un dÃa seremos millonarios, los dioses de la pantalla.
Pero esto no sucede. "
"Sólo cuando lo perdemos todo, no podemos hacer nada".