No importa cuántas veces caiga, siempre tendré la fortaleza y la astucia suficiente para ponerme de pie y aprender de cada error. Estoy muy agradecida por todo lo que la vida me ha dado, sobretodo por el tesoro más grande y puro que existe en mi vida, mi Magdalena, por eso puedo decir que soy feliz, sólo me falta adquirir nuevas experiencias para lograr mis objetivos .