Quiero ser el recuerdo de mi trabajo, de mi esfuerzo, de todas las virtudes que he heredado. Muchas cosas agradables me acompañan dÃa tras dÃa; el perfume de las flores, la grata y tierna sonrisa de los niños, el saludo de la brisa, la claridad del dÃa……..
Hoy tengo una nueva encomienda y necesito fuerzas para realizarla. Tú me darás, señor, todo el entusiasmo que necesito. No me darás tiempo para quejarme ni detenerme para asà cumplir con mi compromiso. Ese compromiso de servir con amor, a cambio de sentirme feliz es constante….
Nuestro compromiso es grande. Tú lo sabes. Gracias por el recordatorio. Ya se me olvidara que debemos continuar nuestra importante tarea. Graci