Me gusta saber que las cosas pueden ser como yo quiero.
Me gusta saber que puedo leer la ultima pagina de un libro, pero aun asà lo leo entero.
Me gusta hacer cosas sin terminarlas, saber que están ahà a medias esperando que las termine.
Me gusta mi pelo y lo terrible que puede ser a veces.
Me gusta escuchar música rara y tratar de imaginar que pasaba por la cabeza del que invento esa música rara.
Me gusta hablar con extraños en la calle, en la micro o en el negocio.
Me gusta intentar rezar y quedarme dormida en el intento, soñar cosas pecaminosas y hacerle burla a Dios.
Me gusta leer los mensajes una y mil veces hasta aprendérmelos de memoria y aunque pasen dÃas me sigan sacando