Serem allò que vulguem ser.
Allà sentada, tan sola, en un paÃs extranjero, lejos de mi trabajo y de toda la gente que conozco, me asaltó un sentimiento. Era como si recordara algo que nunca habÃa conocido o que siempre habÃa esperado.Pero no sabia que era. Tal vez fuera algo que habÃa olvidado o algo que me hubiera faltado toda la vida. Solamente puedo deciros que sentÃa al mismo tiempo alegrÃa y tristeza. Pero no demasiada tristeza; porque me sentÃa viva. Si, viva.