Llevas dentro una serpiente y una paloma; como si envenenara mi mente, convocando al vuelo mis neuronas. Humedad que el sol nunca evapora. Fértil voy de ti, mas no se hacia donde es que me llevas. Creo que me va arrastrando mar adentro.
Deja tus ganas dondo no pueda verlas. NO creo en el amasijo sobrenatural. Y en tu boca de 100 espuelas, traeme el tiempo de las ciruelas. Tiempo de volver al rÃo solo por jugar.
Hay cosas que se aprenden a emoción y llanto. Poco importa quien es quien la cuenta. Contigo voy a puerta abierta y el alma suelta.