Un pequeño manifiesto personal: <<Me doy el lujo de tener mi propio modo de pensar, de tener la suficiente arrogancia para sacar provecho de mis experiencias, de tener la suficiente falta de tacto para tomar mis propias decisiones, de disponer del suficiente descaro de coger para donde deseo. Asumo la responsabilidad de todo aquello que digo, pero nunca de aquello que los otros creen o fingen entender de lo que digo! Por mi propia voluntad me voy de cabeza a través de la pared. Por mis principios, hasta el fin del mundo.>> Y tú, ¿Ya tienes tu propio manifiesto personal?