Nacà hace siete años en las vÃas del tren, nuesto dueño nos abandonó allà con nuestra joven madre porque nos convertirnos enuna carga.
Afortunadamente, mis hermanitos y yo fuimos encontrados por un par de chicas humanas amables y cariñosas que nos llevaron a una casa enorme, donde vivÃan alrededor de quince gatos de diferentes edades, nos cuidó hasta que ELLA llegó un dÃa tocando el timbre.
Pidió vernos, y yo, como era el más guapo de todos me adelanté a saludarla.
Les caà bien desde que me vieron asà que me sacaron de allà envuelto enuna sábana amarilla y me llevaron a casa.
He sido mimado desde entonces, tengo problemas de calcio en mis huesos, y me faltan algunos d