"Soneto 116: No dejen que admita impedimento el enlace de las almas fieles, no es amor el amor que al contemplar un cambio, cambia, o que obliga al distanciado a distanciarse, Oh, no! Es un farol inmóvil que contempla las tempestades y no es estremece nunca. Es la estrella para todo barco sin rumbo, cuya virtud ignora, aunque conoce su altura. El amor no es jugete del tiempo, Por más que lleguen al alcance de su curva guadaña de labios y las mejillas de rosa. El amor no se altera con las horas y semanas rápidas, sino que perdura hasta el fin de los dÃas. Si esto es erróneo y puede probárseme, yo no he escrito nunca, ni hombre alguno ha amado jamás. William Shakespeare."