"En uno de aquellos dÃas manifesté a mis amigos que si en Nicaragua hubieran cien hombres que la amaran tanto como yo, nuestra nación restaurarÃa su soberanÃa absoluta, puesta en peligro por el mismo imperialismo yanqui. Mis amigos me contestaron que posiblemente habrÃa en Nicaragua ese número de hombres, o más..."
"Mi mayor honra es surgir del seno de los oprimidos, que son el alma y nervio de la raza."