A veces, cuando asoma el sol,
llenando de diamantes la quietud del mar,
me doy cuenta de que siempre fue asÃ;
siempre estuve solo y siempre lo estaré.
Uuuuh!... Cuántas veces soñando despierto.
Uuuuh!... Creo verte entre la multitud.
En algún lugar alguien deberÃa escribir
que este mundo no es más que una enorme piedra redonda