como reir y saber que sigues sufriendo, en la penumbra del existir, con una sola lágrima marchita en tu mejilla, que se desborda por tu rostro en el momento más inoportuno,una y una a la vez, una lágrima en número, pero subdividida en muchas, las que no te dejan respirar. Ves a tu anhelado amor, eres tú, pero llorar de tristeza, el espejo mágico de ti, te deja y no lo recuperas, sonries, no lloras más, porque te das cuenta que liberandote de ti, ahora eres tú, esta es mi vida
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