Y llega un momento en el que te cansas de vivir.
No sabes por qué, pero es asÃ.
Miras a tu alrededor y ves como el resto de las personas avanzan en su dÃa a dÃa, sonriendo, felices, mientras que tú te quedas anclada sin poder seguir adelante. No te sientes bien, y no sabes por qué.
No sabes por qué lloras.
No sabes por qué estás tan triste.
No sabes por qué no puedes volver a ser la niña feliz de antes.
No sabes a qué estás anclada.
Simplemente estás, y no estás a la vez.
Es como si estuviera muerta, pero sigues respirando. Estás muerta, pero sigues viva.
Y poco a poco vez como a la gente le da igual que te quedes atrás porque tu presencia ya no es nada.
Necesitas a algu