Mi nacimiento fue muy similar al de Mozart: Ambos vinimos al mundo gracias al embarazo de nuestras respectivas madres.
Antes de mi nacimiento la humanidad necesitaba alimentarse para sobrevivir, que yo naciera no cambió para nada esta situación, por lo que fue necesario que mis padres me dieran de comer (esto evitó que muriera).
Siendo muy niño aprendà a hablar y a comer gracias a que nacà con lengua y boca y todo eso que se usa cuando uno habla (lo de comer lo aprendà porque me daba hambre). Luego cuando crecà siguà hablando y comiendo.
Desde muy niño me distinguà de mis compañeros de escuela gracias a que era y aun soy el único que se apellida Copca (los demás niños