El tiempo pasa. Las personas cambian, las promesas se rompen. Un "para siempre" se transforma lentamente en un "nunca más", una sonrisa en una mueca. Ya no eres fuerte, ahora solo juegas a las esconderte de la dulce agonÃa que porta el pasado. No vives, ahora solo existes. Los recuerdos quedan, las lágrimas intentan borrar todo rastro de melancolÃa.