EnamoradÃsima de Dios, quien me ha salvado y demostrado que sin sacrificio no hay trofeo. Sin sufrimiento no valoramos la vida y luego la recompensa se disfruta mucho más.
Una simple mortal más, enamoradÃsima de Dios, quien puede dar testimonio de tener duras pruebas pero el aliento de Dios tocó mi corazón y ensanchó mi alma para dar a conocer que sus milagros son grandes y si no perdemos la fe conseguimos nuestros sueños.
We’ve updated our privacy policy so that we are compliant with changing global privacy regulations and to provide you with insight into the limited ways in which we use your data.
You can read the details below. By accepting, you agree to the updated privacy policy.