salmo
31:2 Yo me refugio en ti, Señor,
¡que nunca me vea defraudado!
LÃbrame, por tu justicia;
31:3 inclina tu oÃdo hacia mÃ
y ven pronto a socorrerme.
Sé para mà una roca protectora,
un baluarte donde me encuentre a salvo,
31:4 porque tú eres mi Roca y mi baluarte:
por tu Nombre, guÃame y condúceme.
31:5 Sácame de la red que me han tendido,
porque tú eres mi refugio.
31:6 Yo pongo mi vida en tus manos:
tú me rescatarás, Señor, Dios fiel.
31:7 Yo detesto a los que veneran Ãdolos vanos
y confÃo en el Señor.
31:8 ¡Tu amor será mi gozo y mi alegrÃa!
Cuando tú viste mi aflicción
y supiste que mi vida peligraba,
31:9 no me entregaste al pode