Reza conciente de que todo te viene de Dios,
y trabaja como si todo dependiera de tÃ.
Pero que tu trabajo se convierta en oración
y que tu oración te cueste trabajo.
Date tiempo para que tu vida se desenvuelva en el tiempo de Dios y a la manera de Dios. ConfÃa en el EspÃritu. Deja que el EspÃritu haga por ti, lo que tal vez no tengas el ingenio para hacer por ti mismo. Dios te cuida perfectamente, si se lo permites
Trabaja como si no necesitaras el dinero.
Ama como si nunca hubieses sido herido.
Baila como si nadie estuviera mirando.
Canta como si nadie escuchara.
Vive como si fuera el Cielo en la Tierra.