La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabidurÃa misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca.
Querido Señor: Los dioses han sido buenos conmigo. por primera vez en mi vida todo es perfecto tal y como está. Asà que éste es el trato: Tu congelas todo tal y como está y yo no te pediré nada más. Si te parece bien, por favor no me des ninguna señal. Eso es, trato hecho.
Cada nuevo amigo que ganamos en la carrera de la vida nos perfecciona y enriquece más aún por lo que de nosotros mismos nos descubre, que por lo que de él mismo nos da.