" Esa tendencia a traicionar, a mentir, y hacer perfecta/ franca, a esconder o a mostrar mucho, ese cuidado de cuidarte tanto, para acabar narrando tu historia, tu verdad con pelos y señales a un desconocido.
Esas ganas de huir, de salir corriendo cuando alguien empieza a conocerte, aunque no te reveles. Ese vertigo de quedarte, esa indomable sed de alguien, y no estar con nadie, de envolver las caricias en palabras. Esas ganas de cambiar sin renunciar a nada. Esa hambre de imposibles ¿Como pensar en esta confusion contradictoria?, es verdad, y mentira, esta bien y esta mal...no hay salida, nada que hacer..."
(Tratado de culinaria para mujeres tristes- Hector abad Gomez.)
"¿Para qué es