Un Dia Decidà viajar al otro lado del Universo donde encontre a un viejo que iba pregonando: -Esta es la bolsa de los deseos, ¿quién me quiere comprar un deseo?, ¡Solo me queda un deseo para hoy!- Al ver a aquel viejo, sentà un deseo irrefrenable de probar de aquel perfume delicioso que guardaba en su bolsa. Aquel dÃa, por la noche te conocÃ.