La Voluntad de Dios nunca te llevará:
donde la gracia de Dios no te pueda sostener, donde los brazos de Dios no te puedan cargar, donde las riquezas de Dios no puedan satisfacer tus necesidades, donde el poder de Dios no pueda proveerte.
La Voluntad de Dios nunca te llevará,
donde el EspÃritu de Dios no pueda trabajar en ti, donde la sabidurÃa de Dios no te pueda enseñar,
donde el ejército de Dios no pueda protegerte, donde las manos de Dios no puedan moldearte.
La Voluntad de Dios nunca te llevará,
donde el corazón de Dios no pueda envolverte, donde la misericordia de Dios no pueda sostenerte, donde la paz de Dios no pueda calmar tus miedos, donde la autoridad de Dios no pueda