Inherente al arte, sin todavÃa encontrar ese regreso a la inhóspita realidad. La desidia es designada y está destinada a los débiles, aquellos que no poseen ni un sueño por cumplir, ni aunque no sea capaz de visualizarlos haciendolos realidad en un mundo totalmente inexistible. He ahà donde el fracaso lo acecha y lo atrapa por el resto de su vida.