La Madurez del hombre:
consiste en hallar la seriedad
que de niño ponÃa en sus juguetes
Cuando nos olvidamos de lo demás y aceptamos lo que somos, nuestro potencial no conoce lÃmites. El futuro está lleno de promesas y el presente de expectativas. Es cuando denegamos nuestros instintos y lo que somos realmente, empieza la incertidumbre. ¿Dónde nos lleva esta senda? ¿Cuándo terminarán los cambios? ¿Es esta transformación un don o una maldición?
Y la pregunta más importante para todos aquellos que temen al futuro. ¿Podemos cambiar lo que somos?