Aquà la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.
AquÃ, en fin, la cortesÃa,
el buen trato, la verdad,
la firmeza, la lealtad,
el honor, la bizarrÃa,
el crédito, la opinión,
la constancia, la paciencia,
la humildad y la obediencia,
fama, honor y vida son
caudal de pobres soldados;
que en buena o mala fortuna
la milicia no es más que una
religión de hombres honrados.