Pues qué puedo decir que no se haya dicho. Tal vez, que desconozco como soy. Obviamente por esa relativa volatilidad inversa que tengo o por la sentencia que cuelga como oscura nube sobre mi identidad. Parece que tengo una subjetividad atada a los caprichos de una vida que me ha dado tantas cosas para vivir y desvivir. Asà que al final ese soy. Un humano que ha tenido que vivir con lo que tiene desconociendo su camino, más bien trazando un camino donde poner sus descalzos y cansados pies.