Si estás buscando marido, eso no es por aquÃ, sigue de largo. No soporto a la gente que opina acerca de la personalidad de los demás, me molesta que me fastidien, soy nocivo para la gente melodramática y cursi. Me fastidia la gente melosa y pegajosa, detesto a los que se creen genios y alardean de cualquier cosa que les dijo un profesor, que vieron en la tv o que escucharon por ahÃ, pero, oh sorpresa, no se tomaron la molestia de verificar si era cierto o le veÃan cara de poceta. Valoro la amistad sincera, pero sin encompinchamientos ni solidaridades automáticas. No creo en nadie que no sea yo. No admito juicios de valor hacia mi persona. Hago y creo lo que quiero y cuando quiero. Si