"Las personas buenas no mueren nunca: viven eternamente en el bien que dejan detrás de sÃ" (Juan)"El alma del ser humano es tan digna ante los ojos de Dios, que uno recibe un ángel de la guarda al nacer".Dicen que las alegrÃas, cuando se comparten, se agrandan. Y que en cambio, con las penas pasa al revés. Se achican. Tal vez lo que sucede, es que al compartir, lo que se dilata es el corazón. Y un corazón dilatado esta mejor capacitado para gozar de las alegrÃas y mejor defendido para que las penas no nos lastimen por dentro...!