Creo en mis formas, en mis caminos; en esos que
duelen pero que rinden frutos.
Creo en el sendero de la verdad, en el sendero
difÃcil.
Creo en mi alma, en esa porción agazapada de mÃ.
Creo en mis palabras, en mis frases, en mis
abrazos y en mis miradas.
Creo en quien soy y, por lo tanto, en quien a
pesar de las derrotas, no tengo intenciones de dejar
de ser.
Creo en mi sueño, en el magnÃfico sueño que
seguiré construyendo hasta que no me queden más
fuerzas para creer.
Creo en el destino, en mi historia, en mis pasos
y en mi experiencia.
Creo en mis ganas de dar y creo en un mundo
maravilloso que espera recibir mi gota de cariño.
Creo en la amistad, en los b