Todos necesitamos creer en algo. Absolutamente todos. Unos creen en una religión. En un ser más poderoso que ningún otro, capaz de crear todo lo que conocemos. Yo prefiero creer en otras cosas. Yo creo en las personas. En ti, en mÃ. En la capacidad de la humanidad para avanzar. Creo en la posibilidad de un mundo mejor. Un mundo justo. Mejor para todos. Creo en la capacidad del ser humano para conseguir lo que se proponga, a base de ilusión y esfuerzo. Nunca he creÃdo en el destino, tan solo en mis peores momentos. En esos en los que has tomado una mala decisión y te convences a ti mismo de que tenÃa que pasar: el destino. El resto de momentos de mi vida sigo pensando que tú eliges t